Al igual que otras Lagunas de Sierra Nevada la Laguna de Nájera ocupa una pequeña cubeta glaciar que se abastece de agua de los neveros y de pequeños nacimientos cercanos.
A lo largo del verano, si el año no ha sido bueno de nieve, tras la desaparición de los neveros y conforme avanza el verano los nacimientos, algunos ferruginosos, tienden a secarse, lo que puede provocar la desaparición de la lámina de agua de la laguna más grande, que da nombre al conjunto laminar.
Próximo a ésta se encuentra el Lagunillo de Laguna de Nájera, muy pequeño, formado por pequeñas lagunillas colmatadas de agua.
Al igual que la Laguna tiende a secarse en verano, pero su manantial es de los más duraderos de la zona. Además, presenta un aliviadero que vierte sus aguas al río Lanjarón.
Está agrupada dentro de las Lagunas de Lanjarón y es posiblemente de las más vistas, pero menos visitadas, al recorrer el Valle de Lanjarón tanto por Verea Cortá como por la Arista entre el Cerro del Caballo y Tajos Altos, camino al Tozal del Cartujo.
Junto a la Laguna Lavadero de la Reina, que se forma debajo de la Cuenca del Cerro del Caballo donde se encuentra la Laguna del Caballo, son las únicas lagunas que no se encuentran cerca de las líneas de Cumbres que limitan el Valle de Lanjarón, que no visitaremos al recorrer “Verea Cortá” la cual pasa junto a la mayoría de las láminas de aguas del Valle de Lanjarón.
Se encuentra a 2.728 metros en la base de la cara norte del Morrón, en una pequeña cubeta, con dirección suroeste – noreste, abriéndose paso hacia el río lanjarón hacia donde desciende el desagüe del Lagunillo de la Laguna de Nájera.
Está formada por un pequeño nacimiento, aguas arriba, que es su principal aportador durante el comienzo del verano, junto a filtraciones de la cuenca del Cerro del Caballo y de los Canchales del Morrón.
Tiene un desagüe hacia otra pequeña lámina de agua situada en una pequeña cubeta, metros más abajo, el Lagunillo de la Laguna de Nájera.
Éste se alimenta del agua que le surte la laguna y de pequeños nacimientos que hay a su alrededor.
A lo largo del verano, mientras que la Laguna tiende a secarse antes, el Lagunillo puede mantener algunos nacimientos.
Aun así, si el año no ha sido bueno de nieve, al final del verano pueden acabar todos secos.
No suele ser muy visitada por encontrarse alejada de las rutas normales y más usadas por el Valle de Lanjarón.
Podremos acceder a ella por la ruta que desde el municipio de Lanjarón asciende al Cerro del Caballo, pasando por las Casas de Tello y el Refugio Ventura, y continuar hacia el valle de Lanjarón adentrándonos por el río del mismo nombre: Lanjarón – Cerro del Caballo, por el río Lanjarón.
Aun así cualquiera de las ascensiones que podemos realizar en las Rutas de Senderismo al Cerro del Caballo nos permitirá descender a su laguna homónima y a Laguna Nájera.
Como antes hemos comentado, también la podremos alcanzar descendiendo dirección noreste desde el Refugio del Caballo, donde se concentran el mayor número de Montañeros en sus rutas por el Valle.
La ruta más directa se realiza descendiendo desde el Refugio Elorrieta hasta llegar al río Lanjarón para abandonar la vereda y continuar suavemente hasta las ruinas del Refugio Peñón Colorao para posteriormente ascender hasta la Laguna y continuar al Cerro del Caballo.
Esta ruta es la más idónea para las personas que pueden sufrir vértigo y no deseen realizar el peligroso paso de «Verea Cortá».
Depende de la época en que la hagamos podremos disfrutar de innumerables «túneles de nieve» que se forman en el río Lanjarón.