Cala semiurbana ya que se encuentra en las cercanías de El Corralete, de donde toma su nombre.
No presenta ninguna clase de servicios y alcanza un nivel de ocupación medio.
Se extiende por algo más de 400 metros de longitud y 35 en la zona más ancha, formada por arena finas y grava (que ocupa parte de la zona central).
Presenta aguas limpias y cristalinas, idóneas para el baño, el buceo y el submarinismo.
Se accede fácilmente por la carretera que desde la pedanía de Cabo de Gata va al Faro de Cabo de Gata, para desviarnos y tomar el parking a pocos metros de la misma.
Al noroeste de ésta se encuentra La Calilla, diminuta cala, accesible en barca o a través de una estrecha y complicada vereda.