Singular islote cuyo origen era una antigua chimenea volcánica que se alza aproximadamente 4 metros sobre el nivel del mar.
Está formado por andesitas de colores oscuros resaltando colores blancos en la zona alta del mismo debido a los excrementos de las aves que por el transitan.
Llamativo, observado y señalado desde tiempos remotos se le conoce con el nombre de Dedo de Dios o Dedo de Neptuno.
Es claramente visible desde cala Rajá, desde la vereda y carretera que conducen a la misma y desde Punta Baja.
Inaccesible andando, en sus cercanías se encuentra la Piedra del Agujero, último reducto de las focas monjes del mediterráneo (en grave peligro de extinción), antes de desaparecer de Andalucía y de la Península Ibérica.