RÍO VERDE
Situados en el sur de la provincia son dos los ríos que mantienen agua durante todo el año y que realizan todo su recorrido dentro de la provincia para desembocar en el mar Mediterráneo: los ríos Verde y Guadalfeo.
El Río Verde recoge las aguas de la Sierra de Cazulas y del Chaparral.
Tiene su nacimiento en una cuenca imaginaria llena de lomas, en todas direcciones, formada por los Cerros Jaloche (1269,582 m), Cerro Martos (1,221 m), Cerro de la Lata (1,344 m), Cerro de la Cruz (1.262 m) y Lopera (1485,213 m), y que agrupan las aguas de numerosos barrancos que la han horadado.
El Barranco de la Cueva de Funes y el de los Chortales se unen en la Pantaneta de río Verde; posteriormente agrega sus aguas el Barranco de los Madroñales que también las ha recibido del barranco Rambla Seca, para tomar el nombre de arroyo de las Chorreras, hasta su unión con el río Nacimiento (que recoge las aguas del Barranco de la Topera y de la Niña Rica).
A partir de este punto toma el nombre de río Verde, que mantendrá hasta su desembocadura. Son innumerables los cañones, pozas y cuevas que podremos ver al realizar alguno de las rutas por la zona y es uno de los lugares más demandado por los amantes del descenso de barrancos en la provincia, y donde podremos realizar distintas actividades en muchas de las empresas de Turismo Activo que existen en la provincia.
Aguas mas abajo recibe los aportes del río Lentegí sumándoles las aguas de las Sierras de Entresierra y de Itrabo y Molvízar a través de los barrancos de los Bojes, de Arroba, de la Cueva Juncosa y de las Palomas, que como el anterior forma espectaculares cascadas, pozas y cuevas, aunque por supuesto menos conocidas y visitadas.