Se encuentra en el extremo suroriental de la provincia almeriense y se encuentra integrado en el Parque Natural Cabo de Gata – Níjar.
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Presenta dirección suroeste-noreste paralela a la costa, tratándose de una cordillera de origen volcánico, del que quedan numerosos testimonios.
Sus lomas, hacia el sur y este, descienden directamente al mar, formando numerosas calas y, en muchos casos, arrecifes espectaculares, como los Arrecifes de las Sirenas, en el extremo más occidental de la misma; mientras que hacia el norte y oeste está rodeada por el Campo de Níjar.
Entre sus cotas más significativas destacan el Cerro del Fraile (492,508 m), Cerro Peñones (488,397 m), Cerro del Garbanzal (411 m), Cerro de la Tórtola (369 m), Cerro de la Revancha (383 m), Molata (351,469 m) y Mesa Roldán (222,380 m), entre otras.
Presenta un clima mediterráneo subdesértico, al igual que las otras sierras cercanas, caracterizado por la escasez de precipitaciones, una fuerte insolación y unas temperaturas medias elevadas (entre los 16º y 21º), además, unido a su cercanía al mar Mediterráneo, favorece su alta humedad relativa permitiendo la formación de nieblas (en los pequeños valles) y calimas (en las cotas más elevadas) y que origina el desarrollo de la fauna y la flora de los moradores de la Sierra.
Vistas desde la Batería del Cerro de la Testa
La masa arbórea es prácticamente nula, representada por diferentes ejemplares diseminados y aislados, pero sin embargo, el matorral es lo más destacado del mismo, con numerosas especies que se han adaptado a la dureza de su clima, siendo la más representativa el Palmito. Acompañando a estos encontraremos una rica y variada flora, formada por diferentes endemismos, bien que se dan en otras sierras cercanas o únicos de la misma.
Con respecto a la fauna, la población de aves es la más importante en la Sierra, no sólo por su número sino también por la variedad de especies que bien nidifican en ella o se encuentran de paso en sus migraciones, siendo las cercanas Salinas del Cabo de Gata el lugar más visitado por los amantes de la ornitología. Además de estos encontraremos gran variedad de invertebrados, principalmente de mariposas, saltamontes y libélulas, entre otros.
Los grandes mamíferos, como en otras sierras cercanas, se encuentran representados por el jabalí y el zorro, abundando las liebres, conejos y diferentes especies de erizos y musarañas. En cuanto a los reptiles destaca la presencia del camaleón común, lagarto ocelado, diversas culebras y la víbora hocicuda; mientras que entre los anfibios sobresale la presencia del sapo corredor.
Al encontrarse ubicada dentro del Parque Natural Sierra de Gata – Níjar, existen diferentes zonas de protección a las que está prohibido el paso, pero encontraremos diferentes senderos homologados que nos permitirán recorrer numerosas zonas de la misma, de especial belleza e interés, y que iremos agregando posteriormente en su apartado correspondiente.
A través de diversos carriles y pistas podremos realizar varias rutas en BTT que nos permitirán bordearla y visitar los diferentes municipios de sus alrededores.
La Sierra de Cabo de Gata, se ubica íntegramente dentro del término municipal de Níjar y se adentra en el mar Mediterráneo formando diferentes acantilados, calas y espectaculares playas, que podéis ver en la Guía de Playas y Litoral de Níjar.
Algunas de ellas se alcanzan a través de senderos y, en otros casos, sólo se pueden alcanzar por mar, por lo que los amantes del piragüismo encuentran en su litoral un lugar de extraordinaria belleza para hacer sus recorridos, a la vez que para los amantes del submarinismo es uno de los mejores lugares de nuestra comunidad para hacer sus inmersiones, siempre teniendo en cuenta las distintas zonas de máxima protección donde se prohíbe la realización de las mismas.