Con los últimos avances tecnológicos, una gran extensión de terreno y diferentes innovaciones en productos, han hecho del Campo de Dalías una de las zonas de agricultura intensiva de invernadero más productiva a nivel mundial.
El Campo de Dalías recoge todas las ramblas que descienden de la vertiente sur de la Sierra de Gádor, que llevan agua únicamente en periodos de lluvia.
Los de la vertiente oeste y este son los únicos que desembocan al mar, mientras que los del centro se canalizan a través de acequias y canales que recorren la zona abasteciendo, junto a los pozos, a las numerosas balsas que permiten regar este “campo de plásticos”.
Así en la vertiente oeste, que desembocan en el mar Mediterráneo destacan la rambla de Balanegra y la rambla del Loco; mientras que hacia el oeste son la ramblas del Cañuelo y la rambla de las Hortichuelas.
En el extremo sur del mismo y pegado a la costa encontramos las Salinas de Sabinar, las Marismas de Entinas y los Charcones del mismo nombre, que constituyen la Reserva y el Paraje Natural Punta Entinas-Sabinar.
Éstas constituyen un paraíso para los amantes de la ornitología dentro de la Provincia de Almería, junto a las Lagunas Nueva y Honda, que constituyen la Reserva Natural Albufera de Adra, que se encuentran próximas a la desembocadura del río Adra.
En el centro, y lindando con Las Norias de Daza, encontraremos dos grandes balsas, llamadas Balsa del Sapo, que aunque sin incluirse en ningún tipo de protección, son usadas por numerosas aves, tanto para nidificar en ella como para sus tránsitos por la zona.