Playa urbana de la urbanización del mismo nombre.
Se extiende, desde el este por la rambla del Agua hasta una pequeña curva de la línea costera, enfrente de un gran lago artificial, junto al paseo marítimo, donde linda con la Playa El Toyo.
Presenta un nivel de ocupación alto y está dotada con todo tipo de servicios incluidas diferentes instalaciones para personas con movilidad reducida.
Alcanza una longitud aproximada de 900 metros y los 40 metros en la zona más ancha al oriente de la misma junto a la rambla del Agua, donde algunos pescadores tienen varadas sus barcas mientras esperan la llegada la hora de salir a faenar.
Está formada por arena fina y grava y sus aguas son cristalinas con oleaje moderado y ventosa.
Se accede fácilmente desde la urbanización a través del paseo marítimo, donde existen diversos parking para los usuarios de la misma.