FAUNA DE ANDALUCÍA
El Jabalí – Sus scrofa baeticus – es un mamífero abundante en Andalucía generalmente representando en gran parte de las Sierras de nuestra comunidad donde es una apreciada pieza de caza mayor.
Puede llegar a medir algo más de metro y medio de longitud y poco menos de un metro de anchura.
Se caracteriza por tener una cabeza grande y alargada, donde sobresalen dos colmillos alargados y un hocico corto: ojos pequeños; cuello robusto; y patas cortas más largas las delanteras que las traseras.
Es más fácil localizar sus huellas en las Rutas de Senderismo que podéis realizar con nosotros por los Espacios Naturales Andaluces, donde nos sorprenderá comprobar los efectos de sus búsquedas de alimento.
No es raro encontrar gran cantidad de terreno removido, principalmente trufas, bellotas, setas y gusanos, entre otras, que su desarrollado olfato le permite localizar con facilidad.
Presenta gran cantidad de pelos – negros, grisáceos o marrones oscuros -, gruesos, que pueden medir algo mas de 15 centímetros, además de una larga cola que puede alcanzar los 22 centímetros.
Las crías presentan durante los primeros meses de vida numerosas rayas longitudinales que recorren sus cuerpo que van desapareciendo conforme se convierten en adultos.
Tienen un oído muy desarrollado, incluso percibe sonidos que los humanos no podemos escuchar, lo que le permite escapar o esconderse cuando se siente amenazado.
En Andalucía se encuentra únicamente la especie «Sus scrofa baeticus» de la gran cantidad de subespecies que encontramos distribuidas por todo el mundo.
Los jabalíes se suelen desplazar en grupos matriarcales, generalmente de la hembra con sus crías, mientras que los machos mayores suelen ser más solitarios.
Las imágenes han sido realizadas en Espacios Naturales de Andalucía siempre cercanos a las veredas que os proponemos realizar en nuestras rutas y corresponden tanto a piaras como a individuos solitarios.
Al Jabalí de corta edad se le denomina Jabato
– Bermejo a los ejemplares jóvenes que aun no tienen su pelaje negro característico
– Jabalina a la hembra adulta
– y Verraco al macho adulto.
Aunque se mueve principalmente por la noche no es difícil de ver por las mañanas, y más aun cuando la nieve y la falta de alimento les hace descender de las cotas más elevadas.
Es común en ellos bañarse en barro, tanto los machos como las hembras, principalmente para regular su temperatura, eliminar olores, marcar el territorio e incluso para favorecer las relaciones sexuales.
No tiene un depredador natural por lo que ha proliferado la especie en exceso.
Siendo las cazadores sus principales enemigos, de ahí que sea difícil observarlos desde cerca.
No es raro encontrar en determinados lugares “apostaderos” , con numerosos restos de los cartuchos esparcidos por el suelo.
En otros, más escondidos aun, usados por los cazadores (generalmente furtivos) para abatirlos, en algunos casos con restos de gasolina y aceites (no permitidos), usados para atraerlos y abatirlos con mayor facilidad y comodidad.
Sorprendidos en una Ruta de Senderismo por Sierra Nevada por este espectacular ejemplar, en solitario, que descendía por un empinado y agreste barranco, con la soltura de una cabra montes.