OTRA FORMA DE DESCUBRIR ANDALUCÍA
El Geocaching es una nueva modalidad Deportiva
que une el Turismo, el Deporte y el Juego, con la Naturaleza
Geocaching oculto entre rocas con líquenes en Sierra Nevada
Una nueva modalidad deportiva, con cada vez más adeptos es el “Geocaching”.
De manera general se trata de un juego en el que una persona busca un “tesoro” escondido con la ayuda de un Sistema de Posicionamiento Global (GPS).
La palabra geocaching consta de dos partes:
– “geo” haciendo referencia a la Tierra, a la geografía,
– y “caching” que se refiere al proceso de esconder un caché tomando éste último, en el mundo del camping o senderismo, como un recipiente oculto donde guardar cosas.
De esta palabra deriva el término geocacher que define a aquellas personas que intervienen en la actividad ya sea escondiéndolo o encontrándolo.
Dejándolo de nuevo en su lugar
Para iniciar la puesta en marcha de un caché primero una persona (geocacher que esconde) elige un lugar que tenga cierta relevancia.
Éste puede ser natural, humano, histórico, monumental o paisajístico, tanto en las ciudades como en el campo, para darlos a conocer.
Facilitando así a las personas que los buscan (en este caso también geocachers pero buscadores) una aventura, una ruta o un itinerario para no sólo describir un tesoro sino un lugar de especial belleza o de interés.
En el lugar elegido se esconde un “tesoro”, generalmente en recipientes de plástico, más o menos duro (fiambreras o tupper).
Por lo que el contenido del interior permanecerá en buen estado, sobre todo ante las inclemencias atmosféricas.
Ya que todos ellos se encuentran al aire libre y deben de estar, generalmente, en lugares públicos, tienen que estar bien protegidos.
Aquellos que se encuentren el lugares privados deben tener la autorización del propietario (teniendo en cuenta que en Espacios de Especial Protección no se deben poner).
Recipientes y contenidos de dos «tesoros» del Geocaching en Andalucía
El tamaño de estos recipientes puede variar desde contenedores de pocos centímetros de diámetro, generalmente magnéticos, hasta algunos que pueden albergar artículos de cierto volumen.
La elección de unos u otros depende del lugar escogido para su escondite y condiciona el contenido que guarde el caché.
Así en los más pequeños, tan sólo encontramos pequeños trozos de papel para firmar su registro por los futuros geocachers que lo encuentren, sin sitio para nada más.
Distintos tipos y tamaños de Contenedores
Conforme los lugares de escondite permitan aumentar el tamaño del caché encontraremos mayor cantidad de objetos en su interior.
Generalmente éstos tienen poco valor y servirán para intercambiar por otros permitiendo que los futuros geocachers (buscadores) aporten al mismo otros, intentando siempre equiparar lo extraído con lo repuesto en tamaño y/o valor.
Imprescindible en los de mayor tamaño es un libro de visitas (normalmente una pequeña libreta) y algún lápiz con el que poder apuntar el login del geocacher que lo encuentra, con su fecha.
En éste se detalla diferente información sobre el Geocaching ante la posibilidad de ser encontrado de forma accidental por personas ajenas a esta actividad.
Éstas, denominadas mugles en el ambiente del geocaching, pueden terminar expoliando el caché y anulando el juego en ese lugar.
De ahí que es muy importante buscar sitios poco transitados para su escondite.
Por supuesto, se debe de advertir a los futuros buscadores que deben tener la suficiente habilidad para acceder al caché, registrarse y devolverlo a su lugar sin ser visto por mugles que pudieran romper el juego.
Por lo que, en el exterior del contenedor, siempre que su tamaño lo permita, se suele anotar la palabra GEOCACHING, el nombre del caché, login del autor y fecha de su colocación.
Sistema de Posicionamiento Global – GPS – Global Positioning System
Una vez colocado en su escondite, el caché el geocacher autor del mismo tomará las coordenadas geográficas del lugar con su GPS. y, en algunos casos, diferentes fotografías que facilitan la localización del mismo.
Éste las publicará en una ficha en las páginas web especializadas para que el resto de geocachers puedan descargárselas.
Así mismo completará los datos con diferente información sobre el lugar, historia o demás detalles que considere de interés y que ayuden a conocer la zona en donde se va a buscar su Geocaching.
Debe de tener en cuenta que muchos futuros visitantes no sólo no la conocerán, sino que la información sobre el lugar le ayudará y motivará para ir a localizarlo y conocerlo.
Tras la oportuna revisión de la ficha por parte de un colaborador autorizado se activa el caché y estará visible para todo aquel geocacher que quiera buscarlo.
Así se encontrará preparado para descargar las coordenadas geográficas del mismo a su GPS, así como la distinta información del mismo, antes de inicar su búsqueda.
Unos estarán ocultos bajos troncos de árboles caídos, piedras, en pequeños huecos, imantados, por lo que conviene leer con tranquilidad toda la información sobre el caché antes de salir a descubrirlo.
Algunos de ellos presentan distintas pistas intermedias antes de alcanzar el destino final del mismo.
Mientras que otros dan distintas coordenadas que descubrir y descifrar antes de llegar al tesoro final.
Se encontrán catalogados en grados del 1 al 5, tanto el terreno sobre el que se encuentran como la dificultad de su hallazgo.
Tras encontrar el caché el geocacher registrará en la web correspondiente el día que lo encontró así como los datos y comentarios que considere de interés sobre éste.
Geocaching con hoja de anotación y contenedor en un antiguo carrete de fotografías
Dentro de los objetos de intercambio que se pueden hallar en el interior de los cachés existen algunos más valorados.
Conseguir alguno de ellos permiten prolongar el juego más allá de donde nos desprendamos de ellos.
Éstos suelen ser llaveros y monedas (travel bugs y geocoins respectivamente).
Tienen números y claves que facilitan conocer los distintos lugares que visitan y poder seguirles la pista.
Recuerda que puedes encontrar en nuestra «Zona de Descargas»
los Mapas Georrefenciados y Calibrados
para usarlos en Ordenadores, distintas aplicaciones Móviles y GPS
que podrás usar al practicar Geocaching en Andalucía
En Andalucía existen gran cantidad de “Tesoros” (cachés) en todas las provincias permitiendo descubrir lugares de extraordinaria belleza.
Se pueden encontrar en multitud de lugares; tanto en parques, calles, miradores, playas o en los picos y cerros más elevados de las Sierras.
Es un juego para muchos, y una forma de descubrir nuevos lugares para otros.
No se trata únicamente de acumular tesoros, sino de visitar y conocer nuevos lugares que probablemente de otra forma no conocerías.
De todas las maneras también encontraremos tantos seguidos que un simple paseo se puede transformar en un continuo trasiego de descubrimientos.
Aquellos que se encuentran en el campo son especialmente idóneos para iniciar a los jóvenes a conocer la naturaleza.
Así podremos aprovechar las Rutas de Senderismo con la práctica del Geocaching (encontrándonos algunos en puntos que son auténticos retos para el montañero).
Mientras que los que se encuentran en las ciudades permiten visitar lugares singulares de las mismas, a la vez que se hace turismo por ellas.