FLORA DE ANDALUCÍA
Se distribuye por la Península y el noroeste africano, por lo que es fácil encontrarla en cualquiera de las 8 Provincias de Andalucía.
Por lo que está considerado un Endemismo íbero – magrebí.
Se caracteriza por ser una planta anual que encontraremos en fisuras de rocas, en pequeñas oquedades húmedas e incluso en muros y paredes de cortijos abandonados.
Las podemos encontrar a lo largo de nuestra comunidad desde prácticamente el nivel del mar hasta los 2.000 metros de altura.
Sus flores, dependiendo del lugar geográfico y de la cantidad de sol que les den, vienen a salir de abril a agosto.
Sus pequeñas flores son de color rosáceas, con finas venas apenas marcadas.
Puede alcanzar 20 centímetros de altura, aunque nosotros no los hemos llegado a ver tan altas.
La Junta de Andalucía la incluye en la Lista Roja de la Flora Vascular de Andalucía con la categoría de Preocupación menor.
Por la belleza de sus flores y el poco cuidado que requiere se utiliza como planar ornamental.
Se cultivan en Invernaderos y no es difícil encontrarlas en Vivéros.
Algunas de estas imágenes han sido tomadas en las proximidades de la pista al Convento de San Jerónimo, al realizar el Gran Recorrido GR-240 «Sendero Sulayr», en el tramo del Centro de Visitantes El Dornajo al río Monachil, y del siguiente hasta el Collado de Marín.
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